Asalto de civiles judíos a la mezquita de Al-Aqsa
Según la información proporcionada por la Administración de Fundaciones Islámicas de Jerusalén, 219 invasores judíos civiles ingresaron al patio de la Mezquita de Al-Aqsa el primer día de Pesaj.
Testigos presenciales informaron que la policía israelí cerró las puertas de la mezquita desde tempranas horas de la mañana, impidiendo la entrada de los musulmanes. Posteriormente, los invasores judíos civiles atacaron la Mezquita de Al-Aqsa desde la Puerta de Megaribe en grupos bajo la supervisión de la policía israelí.
Una vez completadas las incursiones, la policía israelí se retiró de los patios de la mezquita. Se anunció que la policía, que se preparaba para proteger a los invasores judíos por la tarde, también confiscó los documentos de identidad de los jóvenes palestinos que asistieron a la oración del mediodía, para asegurarse de que salieran durante la incursión de los invasores.
Los invasores judíos civiles están intensificando sus incursiones en la Mezquita de Al-Aqsa durante las festividades religiosas.
Respecto al statu quo de la Mezquita de Al-Aqsa, Jordania es considerada responsable de los asuntos religiosos en Jerusalén en virtud del Acuerdo de Wadi Araba firmado con Israel en 1994. Según un acuerdo firmado entre el rey Abdullah II de Jordania y el presidente palestino Mahmud Abbas en 2013, Jordania tiene el derecho de defender y proteger Jerusalén y los lugares sagrados allí.
De acuerdo con este acuerdo, la Mezquita de Al-Aqsa y sus fundaciones están bajo la custodia de la Administración de Fundaciones Islámicas de Jerusalén, afiliada al Ministerio de Asuntos Islámicos y Asuntos Sagrados. A pesar de esto, desde 2003 los judíos visitan la mezquita acompañados por la policía israelí, en una decisión unilateral de Israel que viola la soberanía de la Administración de Fundaciones.
Se argumenta desde la administración israelí que se ha mantenido el status quo histórico en la Mezquita de Al-Aqsa, donde solo los musulmanes pueden llevar a cabo sus rituales, mientras que los miembros de otras religiones solo pueden visitarla. Sin embargo, las cámaras frecuentemente captan a invasores judíos civiles realizando rituales religiosos bajo la protección de la policía israelí durante las incursiones en la Mezquita de Al-Aqsa.
