Calificación de S&P Global: Crecimiento económico de Kazajstán por debajo de las previsiones
La agencia de calificación internacional S&P Global Ratings confirmó la calificación crediticia de Kazajstán en BBB y mantuvo la perspectiva estable. Según Halyk Finance centro analítico es mucho más bajo que los niveles establecidos en los documentos programáticos del país y se refiere al problema de la inadecuada previsión presupuestaria.
El sector de petróleo y gas del país, que representa el 20% del producto interno bruto (PIB), más de la mitad de las exportaciones y el 30% de los ingresos del gobierno, es vital para mantener la calificación positiva.
Sin embargo, S&P Global Ratings señala que la caída en la producción de petróleo ha tenido un impacto negativo en las tasas de crecimiento económico, lo que lleva a su pronóstico moderado para el crecimiento del PIB al final del año en curso en 3.7%, informó Las finanzas de Halyk el 2 de septiembre.
“La agencia de calificación espera indicadores moderados de crecimiento económico no solo para el año en curso, sino también para los próximos tres años. Incluso el lanzamiento del proyecto de expansión futura de Tengiz en el segundo semestre de 2025, que debería aumentar la producción de petróleo de 90 millones de toneladas en 2023 a 98 millones de toneladas en 2025, no conducirá, en su opinión, a un crecimiento económico superior al 4,5%. Por lo tanto, la tasa media de crecimiento del PIB en 2025-2027 será del 3,7% anual”, se lee en el comunicado.
La agencia señala que la tasa real puede ser más alta que su previsión si el programa de privatización se lleva a cabo adecuadamente y conduce al crecimiento del sector privado y la inversión extranjera.
Sin embargo, según los expertos de S&P Global Ratings, la privatización avanza lentamente y el proceso de toma de decisiones centralizado, los débiles controles y contrapesos, la censura y la percepción de corrupción siguen siendo elevados. La situación se mantendrá así durante los próximos tres años.
Entre los factores positivos de la economía del país, que en distintos grados permiten gestionar los riesgos externos e internos, S&P Global Ratings nombró la fuerte posición de acreedor neto externo dado el nivel moderado de deuda externa, y los altos indicadores de activos líquidos del gobierno, como los depósitos gubernamentales y los activos líquidos externos del Fondo Nacional.
La calificación actual puede mejorarse en caso de reformas, mayores tasas de crecimiento del sector no petrolero, menores riesgos geopolíticos y estabilidad política.