Creando glaciares artificiales: la contribución de Kyeongeun Lee de Corea en Kirguistán
Kyeongeun Lee, un asistente de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) en Kirguistán, es conocido por su trabajo en la prevención de conflictos y la consolidación de la paz. A su llegada a Kirguistán a finales de marzo de 2023, se sumergió en el proyecto «Prosperidad compartida mediante la cooperación en las regiones fronterizas de Kirguistán y Uzbekistán», trabajando para mejorar la cooperación ambiental y socioeconómica transfronteriza entre ambos países.
Desde entonces, ha sido testigo de la impresionante belleza natural de Kirguistán, participando en eventos deportivos importantes, como maratones. Además, ha dedicado su tiempo a visitar comunidades locales, como la aldea de Kashka-Suu en la región de Jalal-Abad, donde ha disfrutado de la hospitalidad y el arduo trabajo de sus habitantes.
Como parte de su labor, Kyeongeun Lee ha estado involucrado en un proyecto para la creación de un glaciar artificial en el distrito de Aksy, que ha demostrado ser una solución efectiva para la escasez de agua de riego en la región. Los esfuerzos de la FAO y la colaboración de la comunidad local han tenido un impacto significativo, proporcionando acceso constante a agua dulce para el riego y otras necesidades.
A pesar de las maravillas que ha experimentado en Kirguistán, también ha enfrentado desafíos, como la barrera del idioma. Sin embargo, se muestra comprometido a aprender kirguís y ruso para mejorar su comunicación con la población local.
Lee ha encontrado consuelo en lugares como el parque Ataturk y ha disfrutado de la gastronomía local, destacando el kompot como uno de sus platos favoritos. Aunque ha estado dispuesto a probar nuevos sabores, ha sido honesto al admitir que el kumys es más amargo de lo que esperaba.
En su interacción con la población local, ha descubierto la acogida y el interés hacia su cultura coreana, sorprendido por el número de tiendas y restaurantes de productos coreanos en Kirguistán, así como por la comprensión del idioma coreano por parte de muchas personas.
A pesar de los aspectos positivos, Lee también ha compartido su preocupación por la calidad del aire en Bishkek, esperando que la situación mejore en el futuro.
La historia de Kyeongeun Lee en Kirguistán es un testimonio de su dedicación a la construcción de la paz y el compromiso con la comunidad local, a la vez que demuestra su voluntad de adaptarse y apreciar la belleza y la diversidad de Kirguistán.
