Cuatro detenidos por contrabando: túnel secreto entre Uzbekistán y Kirguistán
Descubren túnel subterráneo de contrabando en Andijan
En marzo de 2024, los oficiales del Departamento Regional del Servicio de Seguridad del Estado de Andijan hicieron un sorprendente hallazgo: un túnel subterráneo secreto que conectaba el vecindario "A. Navoi" en la ciudad de Khanabad, en la región de Andijan, con la aldea de Bekobod en el distrito de Suzak, en la región de Jalal-Abad de Kirguistán.
Este túnel fue utilizado por un grupo penal organizado para el contrabando de mercancías entre Uzbekistán y el país vecino. Durante la operación, las autoridades detuvieron a un ciudadano de Kirguistán que intentaba contrabandear 812 teléfonos móviles, valorados en 5.95 mil millones de UZS, así como 1.73 kilogramos de artículos de oro de bajo grado, valorados en 1.56 mil millones de UZS. Todos estos elementos fueron incautados como evidencia del delito.
La investigación llevó a las autoridades a tres cómplices uzbekos del contrabandista, quienes residían en Andijan y en el distrito de Altinkul. En sus domicilios, se confiscaron 1,380 teléfonos móviles, avaluados en 2.84 mil millones de UZS, junto con 32 auriculares, 920 adaptadores, 338 cables USB-C y 40 cargadores. Todos los artículos fueron documentados y confiscados conforme a las regulaciones legales.
El túnel en sí se localizaba a una profundidad de entre 18 y 20 metros, con un ancho de 60 a 70 cm, una altura de 170 a 180 cm y una longitud de 300 a 350 metros. Las indagaciones revelaron que este grupo criminal estaba dirigido por el ciudadano kirguís, quien había asignado roles específicos a cada uno de los miembros del equipo. En consecuencia, se abrió un caso penal separado contra él.
El Tribunal Penal de Andijan halló culpable al ciudadano kirguís bajo los artículos 182 y 223 del Código Penal de Uzbekistán, condenándolo a seis años de prisión. Asimismo, tres ciudadanos uzbekos fueron encontrados culpables bajo el artículo 182, recibiendo cada uno una condena de cinco años de prisión.
De acuerdo con el fallo judicial, todos los bienes de contrabando y la vivienda en Khanabad, desde donde operaba el túnel, fueron confiscados por el estado. El túnel fue sellado y destruido. Además, otro túnel subterráneo encontrado en una vivienda de la misma zona también fue desmantelado por orden judicial, y la propiedad así como los artículos incautados fueron confiscados en beneficio del estado. El ciudadano uzbeko involucrado en este segundo caso recibió una condena de cinco años de prisión.
Las autoridades han revelado que los teléfonos móviles contrabandeados estaban siendo distribuidos para la venta en centros comerciales de Andijan y Tashkent. Las investigaciones continúan para desmantelar esta red de distribución y asegurar justicia para los involucrados.
