El sistema UzTest bajo fuego por retrasos y críticas
Un aumento en la demanda de pruebas de cumplimiento de vehículos en las instalaciones de pruebas de Piskent en Uzbekistán ha generado largas colas electrónicas, lo que frustra a los importadores y propietarios de vehículos. Los retrasos se deben a cambios recientes que exigen inspecciones técnicas en Piskent en lugar de en los puntos de control aduanero, así como nuevas pruebas de compatibilidad electromagnética para vehículos importados de forma privada.
La situación se ha visto agravada por el cierre temporal de algunos laboratorios de pruebas en las instalaciones de Piskent por razones no especificadas. Los informes indican que estos cierres pueden prolongar los tiempos de espera para las inspecciones hasta febrero. El 8 de enero, el canal autodeclarante Telegram informó de una espera de 12 días para las citas, con los primeros espacios disponibles después del 20 de enero.
Los representantes de UzTest dijeron a Kun.uz que se necesitan entre 30 y 35 minutos para probar un vehículo. A pesar de funcionar las 24 horas del día, los 7 días de la semana, el centro sólo puede procesar unos 50 vehículos al día, o 18.000 al año. Esta capacidad es insuficiente y cubre sólo el 28% de la demanda real.
Los esfuerzos para mitigar los retrasos a través de un sistema de colas electrónicas han hecho poco para aliviar la insatisfacción del público. Los críticos argumentan que trasladar los requisitos de pruebas aduaneras a Piskent sin una infraestructura adecuada ha provocado cuellos de botella logísticos.
El economista Otabek Bakirov también ha pedido que UzTest sea clasificado como monopolio y sometido a una supervisión regulatoria más estricta. «UzTest opera como un dragón monopolista», escribió en las redes sociales. «Los consumidores y empresarios de todo Uzbekistán deben viajar a su guarida en Piskent para realizar pruebas, con tarifas y tiempos de espera arbitrarios».
Bakirov destacó la falta de transparencia en los honorarios, que oscilarían entre 6 y 9 millones de UZS, y la ausencia de restricciones de procedimiento para regular las operaciones de la organización.
Según la ley de Uzbekistán sobre reglamentación técnica, los órganos estatales de supervisión tienen prohibido combinar funciones regulatorias y de evaluación del cumplimiento o participar en prácticas que discriminen a las empresas. UzTest, que opera bajo la Agencia de Regulación Técnica, tiene el mandato de realizar evaluaciones de cumplimiento de forma independiente.
Los continuos retrasos y el descontento público han provocado llamados a reformas sistémicas para mejorar la eficiencia y garantizar una competencia leal. Ni la Agencia de Regulación Técnica ni UzTest se han pronunciado al respecto.
Desde el 1 de noviembre de 2024, los vehículos importados están sujetos a pruebas de conformidad exclusivamente en las instalaciones de Piskent. El cambio tiene como objetivo estandarizar las evaluaciones de vehículos, pero ha desbordado la capacidad de la instalación.