El T-rex no era tan inteligente como se creía: estudio
Un nuevo estudio revela que el Tyrannosaurus rex (T-rex) no era tan inteligente como se creía anteriormente. Un equipo de científicos internacionales, incluyendo investigadores del comportamiento, paleontólogos y neurólogos, han demostrado que estos dinosaurios se comportaban más como cocodrilos y lagartos.
Investigadores de diversas universidades, como Bristol y Southampton en Inglaterra, Heinrich-Heine en Alemania, Alberta en Canadá y el Museo Real de Ontario, examinaron las técnicas utilizadas para estimar el tamaño del cerebro y el número de neuronas de los dinosaurios. Contrario a investigaciones anteriores, se concluyó que el tamaño del cerebro y el número de neuronas de los dinosaurios estaban sobreestimados.
El estudio resalta que no se puede utilizar únicamente el número de neuronas como indicador de la inteligencia de los animales extintos. Es necesario observar una amplia gama de evidencia, como la anatomía esquelética, el tejido óseo, el comportamiento de parientes vivos y rastros de fósiles. Esta información se obtiene de las cavidades y formas minerales encontradas en fósiles, conocidas como «endocast».
Los científicos enfatizan que las estimaciones previas sobre la inteligencia de los dinosaurios, basadas en el número de neuronas, pueden llevar a interpretaciones engañosas. Según el Dr. Hady George de la Universidad de Bristol, la mejor manera de describir la inteligencia de los animales extintos es considerar diferentes aspectos de su biología y no depender únicamente de una métrica como el número de neuronas.
En resumen, el T-rex y otros dinosaurios pueden no haber sido tan inteligentes como se creía, y es importante considerar una variedad de evidencia para comprender completamente su comportamiento y capacidad cognitiva.
