La mejora de la red es crucial para la transición a la energía verde en Kazajstán, afirma un experto.
La modernización de la infraestructura de la red podría convertirse en un elemento clave que impulse la adopción de energía verde en Kazajstán, según Sultan Valikhanov, experto del portal EconomyKZ.
“La electrificación verde no es sólo una necesidad medioambiental. Es una oportunidad para que Kazajstán alcance un nuevo nivel de desarrollo sostenible. Aprovechando la experiencia internacional, el país puede convertirse en líder en energías renovables en Asia Central. Pero esto requiere hoy medidas decisivas”, escribió Valijánov en EconomyKZ.
El informe TotalEnergies Energy Outlook 2024 enfatiza que un cambio hacia la energía renovable puede reducir significativamente las pérdidas del sistema energético. Hoy en día, alrededor del 60% de la energía se pierde debido a ineficiencias en la conversión y el transporte. En el escenario de “ruptura”, que propone un camino para permanecer por debajo de +2 grados Celsius para 2100, estas pérdidas podrían reducirse al 40%.
Según Valikhanov, la falta de infraestructura sigue siendo una de las barreras clave para la transición verde.
“En Europa, hasta el 15% de la energía renovable se pierde debido a una capacidad de red insuficiente. Kazajstán enfrenta un problema similar: regiones con alto potencial de generación, como Mangystau o Zhambyl, tienen dificultades para conectarse a la red nacional. Esta barrera frena el desarrollo del sector y desalienta a los inversores”, escribió Valijánov.
Valikhanov cita la experiencia de la Unión Europea, China y Estados Unidos (EE.UU.) en la implementación de una transición verde eficiente.
“China está demostrando un rápido desarrollo en energía solar y eólica. Para 2023, China se habrá convertido en líder en capacidad instalada de paneles solares y turbinas eólicas, superando a todos los demás países. En el país se desarrollan no sólo la generación, sino también soluciones tecnológicas para el almacenamiento de energía, lo que soluciona el problema de la inestabilidad de las fuentes renovables”, destacó Valijánov.
«Kazajstán podría aprovechar la experiencia china en la adaptación de tecnologías como el almacenamiento de energía para minimizar el impacto de las condiciones variables típicas de los recursos solares y eólicos», añadió.
Otro desafío importante es la continua y fuerte dependencia energética de Kazajstán del carbón, con más del 70% de la electricidad generada por centrales eléctricas alimentadas con carbón.
“Esto plantea riesgos no sólo medioambientales sino también económicos. Según el [TotalEnergies Energy Outlook] Según el informe, sustituir el carbón por fuentes de energía renovables como la solar y la eólica, combinado con plantas flexibles alimentadas por gas, tiene el potencial de reducir las emisiones de CO2 en hasta ocho gigatoneladas a nivel mundial. Para Kazajstán, esta es la manera de mejorar la calidad del aire y cumplir con los compromisos climáticos internacionales”, afirmó Valikhanov.
En Estados Unidos, una estrategia clave implica atraer inversión privada a través de incentivos como exenciones fiscales y subsidios para empresas que impulsen el desarrollo de energía verde.
«Kazajstán, con sus vastas reservas de carbono, podría seguir el ejemplo de Estados Unidos combinando el desarrollo de fuentes de energía nuevas y convencionales, pero con énfasis en la sostenibilidad ambiental», dijo Valikhanov.
Ofrecer incentivos para el transporte eléctrico podría ser otro impulsor de la transición verde.
“Según el informe, las ventas de vehículos de emisiones cero se multiplicarán por seis de aquí a 2050. En Kazajstán, el uso de vehículos eléctricos sigue siendo mínimo. La introducción de subvenciones e infraestructura para las estaciones de carga podría acelerar la transición al transporte ecológico”, concluyó Valijánov.