Mujeres de Batken cultivan rosas con apoyo de la FAO
En la región de Batken de Kirguistán, las mujeres han encontrado una forma innovadora de convertir las tierras degradadas en una fuente de ingresos y desarrollo sostenible. La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) ha informado que las mujeres en la aldea de Kara-Suu en el distrito de Leilek han comenzado a cultivar rosas en parcelas improductivas que sufren de sequías y deslizamientos de tierra.
Según la organización, este enfoque agrícola climáticamente inteligente no solo mejora la seguridad alimentaria, sino que también mitiga los impactos del cambio climático y reduce los riesgos de desastres. La FAO ha proporcionado más de 2.200 plántulas de rosas de alta calidad junto con materiales de cercado a las mujeres participantes en el proyecto.
Estas plantas son regadas a través de un sistema de riego por goteo, una solución crucial en un entorno con escasez de agua. Las rosas, ricas en vitamina C y otros nutrientes esenciales, servirán como una nueva fuente de ingresos para 15 familias en la aldea.
Mamahaba Ormosheva, participante del proyecto y líder del Grupo de Iniciativa de Mujeres, expresó su gratitud por esta iniciativa: «Gracias a este proyecto, ahora podemos cultivar tierras que antes se consideraban inutilizables. Además, ha fortalecido nuestra comunidad: nos comunicamos más, nos apoyamos y colaboramos. Pero lo más importante, ha creado una oportunidad de ingresos vitales para las mujeres que antes se quedaban en casa».
Mirando hacia el futuro, los habitantes de la aldea planean expandir sus plantaciones de rosas, aumentando el potencial económico y mejorando la calidad de vida en medio de un clima cambiante.
