¿Relaciona el gobierno húngaro la prohibición de trabajadores invitados con el temor al desempleo?
El gobierno húngaro planea prohibir empleo de trabajadores invitados de países no pertenecientes a la UE
Informes recientes sugieren que el gobierno húngaro está considerando implementar una prohibición de emplear trabajadores invitados de países no pertenecientes a la Unión Europea a partir del 1 de enero de 2025. Esta medida ha generado preocupación entre las empresas locales, especialmente aquellas que dependen en gran medida de trabajadores extranjeros. Aunque el gobierno no ha confirmado oficialmente la propuesta, se especula que las altas tasas de desempleo podrían ser la razón detrás de esta drástica medida.
Según los informes, esta nueva política implicaría que los trabajadores de la mayoría de los países no pertenecientes a la UE ya no serían elegibles para nuevos permisos de trabajo, con la excepción de los trabajadores de Georgia. Además, se impediría la extensión de los permisos de trabajo más allá de un año para aquellos trabajadores que inicialmente obtuvieron permisos de dos años. Esta posible legislación ha generado preocupación en sectores como la manufactura, la logística y los servicios de entrega, respecto al futuro de su fuerza laboral.
La falta de consulta entre el gobierno y las empresas ha generado confusión y pánico entre los líderes empresariales. Algunos especulan que el gobierno intenta anticiparse a posibles aumentos del desempleo en los próximos meses, en medio de preocupaciones de que los trabajadores locales puedan perder sus empleos y el gobierno prefiera evitar que la mano de obra extranjera ocupe esos puestos.
Empresas como Master Good, que dependen de trabajadores invitados, temen las consecuencias de esta medida. Sin estos trabajadores, se teme que el crecimiento sea insostenible y que la producción disminuya. Aunque los detalles de la regulación propuesta aún no son claros, el cambio rápido y disruptivo preocupa a muchas empresas. Los ejecutivos argumentan que un cambio tan radical no puede implementarse sin una discusión adecuada y un período de ajuste razonable.
Dada la situación económica actual de Hungría, preocupa que restringir el empleo de trabajadores invitados pueda empeorar la economía y provocar una caída significativa en el PIB del país. Los desafíos económicos que enfrenta el país hacen que sea crucial abordar esta posible prohibición con cautela y considerar sus impactos a largo plazo en la economía húngara.