Revolut, la sabia salida de Hungría tras la decisión del gobierno
El gobierno húngaro ha anunciado que cada aldea en Hungría deberá contar con un cajero automático para aumentar la retención de la población en las zonas rurales del país. Esta medida también tiene como objetivo garantizar el derecho constitucional de los ciudadanos de utilizar efectivo.
Según información reciente de Economía, los bancos en Hungría deberán instalar 2,000 cajeros automáticos en los asentamientos rurales y congelar o reducir las tarifas de las cuentas al nivel del año pasado. Esto implicará que los bancos perderán miles de millones de forints en ganancias.
La Asociación Bancaria Húngara ha propuesto que el sector FinTech comparta los costos de la instalación de cajeros automáticos. Sin embargo, algunas empresas de FinTech como Revolut y Wise han expresado que establecer cajeros automáticos no forma parte de sus procedimientos comerciales habituales, aunque lo harían si la situación lo requiere.
Por otro lado, si las exigencias del gobierno húngaro afectan la competitividad de las empresas de FinTech, estas podrían abandonar el mercado. A pesar de ello, las compañías de FinTech han contribuido positivamente al desarrollo digital del sector bancario húngaro, siendo un motor de innovación como se ve en las aplicaciones de banca móvil.
La incógnita radica en si el gobierno y el Banco Nacional harán que empresas como Wise y Revolut establezcan cajeros automáticos en las pequeñas aldeas húngaras. De ser así, estas compañías podrían optar por abandonar el mercado húngaro.
