Dos medallas en esgrima en un fin de semana
El equipo femenino húngaro de esgrima logró una destacada actuación en la Copa Mundial de Sable en Plovdiv, Serbia, obteniendo la medalla de plata. Por su parte, Gergely Siklósi también se destacó al subir al podio en el Gran Premio de Doha Epée en Qatar el pasado domingo.
El equipo compuesto por Sugár Batai, Liza Pusztai, Luca Szűcs y Anna Spiesz comenzó con una victoria contundente sobre Hong Kong en la Copa Mundial. Luego, lograron llegar a la final con dos victorias más sobre equipos de Polonia y Francia.
En la final, las húngaras se enfrentaron a Japón y estuvieron en una buena posición durante la mayor parte del encuentro. Sin embargo, el equipo japonés logró remontar en los últimos momentos y se llevaron la victoria por 45-44.
El entrenador del equipo nacional, Etele Ravasz, se mostró positivo ante la actuación del equipo y destacó la importancia de haber logrado estabilidad en dos Copas Mundiales esta temporada. A pesar de haber obtenido la medalla de plata, Ravasz señaló que siempre hay lecciones que aprender para seguir mejorando.
Por otro lado, el equipo masculino no tuvo la misma suerte, sufriendo una derrota sorpresiva ante Hong Kong en los cuartos de final. A pesar de vencer a Italia en la ronda de consolación, no lograron avanzar más y terminaron en la duodécima posición.
En el mismo día, Gergely Siklósi brilló en Doha, obteniendo también una medalla de plata. El esgrimista húngaro demostró su calidad en la pista, llegando hasta la final donde se enfrentó a un duro rival. A pesar de su esfuerzo, Siklósi tuvo que conformarse con la medalla de plata.
En resumen, el equipo húngaro de esgrima tuvo una destacada participación en la última Copa Mundial, demostrando su talento y potencial en la disciplina. A pesar de los altibajos, todos los integrantes se mostraron orgullosos de representar a su país en esta competencia internacional.
