El primer ministro Orbán actuará como «mediador justo» durante la presidencia húngara de la UE
El gobierno de Hungría asumirá la presidencia de la Unión Europea con la intención de garantizar la operatividad y reacción de la UE ante las crisis en un contexto político y de seguridad extremadamente vulnerable, anunció János Boka, ministro de Asuntos de la UE, durante un debate con la prensa el pasado viernes.
Boka señala que la presidencia húngara se enfrentará a desafíos como la guerra entre Ucrania y Rusia, la fragilidad en Medio Oriente y posibles crisis en otras regiones conflictivas. El objetivo es lograr una transición sin problemas y ser reconocidos como mediadores neutrales y justos. Además, se buscará orientar las negociaciones de la UE en temas como competitividad, seguridad, política agrícola común y demografía, así como migración y cohesión.
El primer ministro Viktor Orbán participará en eventos protocolarios de alto nivel durante la presidencia, siendo fundamental su papel como mediador político informal. El gobierno espera organizar alrededor de 220 eventos en los seis meses de presidencia, con un presupuesto de 37.000 millones de florines (95,8 millones de euros), principalmente en el Várkert Bazár de Budapest.
Hungría mantendrá su postura en cuestiones que considera diferenciadas de las de Europa occidental, incluso durante la presidencia. A pesar de las expectativas elevadas, el gobierno se compromete a cumplir con sus responsabilidades durante este periodo.
